Entre los procedimientos quirúrgicos estéticos más comunes para mejorar la apariencia y corregir las desproporciones del contorno facial, la bichectomía llega a ser el método más indicado para definirlo a través de la extracción de grasa de las mejillas.

Y es que producto de la intervención, se logra una simetría facial, se acentúan los pómulos y se define la zona media e inferior del rostro. Todo ello producto del retiro de grasa bucal, el cual se sitúa usualmente por genética o un incremento de peso.

¿Por qué realizarse una bichectomía?

La bichectomía es más adecuada en personas de 20 y 30 años, con caras voluminosas, cuadradas o redondas. Nunca se debe realizar este procedimiento en un adolescente, ya que aún están creciendo a sus características adultas.

· Destaca los pómulos.

· No deja cicatriz perceptible.

· Es una cirugía de bajo riesgo.

· No requiere de retoques constantes.

· Mejora la autoestima y seguridad.

· Alarga y elimina la redondez del rostro.

· Estructura facial esbelta y delgada.

· Fomenta la simetría entre ambas mejillas.

· Tonifica el rostro en las personas mayores.

· Perfila el óvalo facial y define el borde de la mandíbula.