Tratamiento de las secuelas de poliomielitis y asimetrías graves en las piernas

Tratamiento de las secuelas de poliomielitis y otras asimetrías graves de las piernas.

La reconstrucción de los miembros inferiores es probablemente una de las disciplinas más amplias y con aspectos más diversos de la Cirugía Plástica. El origen de los problemas, susceptibles de reconstrucción es extremadamente amplio; desde traumatismos complejos por accidentes o secuelas de cirugía oncológica, a defectos congénitos o degenerativos como la Poliomielitis. Los principales objetivos de estas reconstrucciones deben ser lograr una adecuada función, estética y simetría. Continúa leyendo si quieres saber más sobre las opciones que existen para el tratamiento de las secuelas de poliomielitis y otras asimetrías graves de las piernas.

Tipos de asimetrías y secuelas.

A diferencia del aumento estético de pantorrillas muslos y tobillos, los casos relacionados con secuelas deben ser analizados y tratados de manera mucho más cuidadosa.

  • Secuelas sin cirugías o cicatrices previas. Las deformidades congénitas como las malrotaciones, secuelas neurológicas o poliomielitis son un ejemplo. En estos casos la deformidad y la asimetría no se acompaña de cicatrices o estas son posquirúrgicas y debidas a cirugías correctoras previas. En estos casos no suelen existir defectos en la piel o los músculos más allá de su tamaño y elasticidad.
  • Secuelas severas de traumatismos, cirugías o complicaciones. En estos casos puede haber cicatrices extensas y amplia perdida de tejidos. A la falta de tejidos y elasticidad se suman otras cicatrices, injertos o zonas de curación complicadas.

Valoración previa del paciente.

Antes de proceder con cualquier tipo de reconstrucción es muy importante la valoración previa del paciente; se deberá valorar especialmente:

  • La magnitud del defecto o asimetría. Será preciso evaluar la magnitud del defecto y si afecta a la pierna, al muslo o a todo el miembro inferior. En casos leves pueden conseguirse resultados excelentes, mientras que en casos muy graves la mejoría puede ser muy limitada.
  • La calidad de los tejidos. Esta valoración es especialmente importante porque determinará si la piel u otros tejidos se podrá expandir/estirar para adaptarse al nuevo volúmen que buscamos. No valorar esto de forma adecuada puede tener complicaciones graves. Si la elasticidad es deficiente es probable que haya que realizar el tratamiento en varias fases para permitir a los tejidos adaptarse gradualmente. En estos casos los lipoimplantes o injertos de grasa suelen ser especialmente valiosos.
  • El estado del flujo sanguíneo de las piernas. En algunas ocasiones a parte del defecto estético puede haber problemas de irrigación sanguínea que impidan o limiten el tratamiento. Si la irrigación es deficiente es probable que haya que realizar el tratamiento en varias fases para no deteriorar más la circulación. En estos casos los lipoimplantes o injertos de grasa suelen ser especialmente valiosos.

Opciones tradicionales para reconstrucción de asimetrías en las piernas.

Muchos de los pacientes que sufren graves asimetrías en las piernas tienen en común varios factores: asimetrías notorias en los tobillos, piernas o muslos y diversos grados de atrofia en la piel o los músculos. A esto puede unirse una falta de elasticidad significativa en la piel. Todo esto es especialmente importante si tenemos en cuenta que la irrigación sanguínea y el drenaje linfático de las piernas son especialmente delicados y deben ser tenidos muy en cuenta ante cualquier cirugía correctora.

Para tratar las asimetrías graves de las piernas existen varias opciones:

  • Colgajos a distancia o locales. Los colgajos son transferencias de tejidos que los cirujanos plásticos empleamos para cubrir defectos. Consisten básicamente en transferir una porción de tejido (normalmente piel, pero puede ser también músculo, hueso o una combinación de ellos) de un lugar sano al lugar defectuoso.
  • Materiales de relleno inyectables. Útiles para pequeños defectos pero con un elevado coste y sin resultados permanentes. En el momento actual el único material autorizado por Sanidad es el Ácido Hialurónico.
  • Prótesis sólidas. Son útiles para generar grandes volúmenes en áreas concretas como los gemelos. Solo existen prótesis específicas para los gemelos, para el resto de zonas se suelen emplear prótesis a medida. Las prótesis que se usan para el aumento de gemelos y cara interna de muslos son de silicona de alta densidad y necesitan de incisiones de unos 3-4 cm en el hubo posterior de la rodilla o en la ingle, respectivamente. La técnica más habitual coloca los implantes por encima de los músculos de la pantorrilla.
  • Tratamiento de las asimetrías de las piernas mediante Lipoimplante.

    De las opciones descritas en el apartado anterior los colgajos o los injertos de piel suelen suponer a colocación o ampliación de incisiones y cicatrices, son técnicas complejas y con postoperatorios largos. Solo suelen mejorar zonas muy concretas por lo que los resultados son limitados.
    Los materiales de relleno inyectables y las prótesis sólidas supone el uso de materiales sintéticos que no siempre se toleran bien en tejidos previamente dañados o con mala irrigación. Mejoran areas concretas y definidas como los gemelos.
    Los injertos de grasa y los lipoimplantes proporcionan resultados estables y duraderos, pueden abarcar áreas extensas, incluso los 360º de la pierna, el tejido adiposo es del propio paciente y no será rechazado y pueden repetirse las veces necesarias. Para su realización se emplean los tres principios básicos de cualquier Lipoimplante o injerto de grasa:

    • Obtención de la cantidad necesaria de la grasa donante del propio paciente a través de una liposucción modificada.
    • La grasa obtenida debe ser procesada debidamente para que su supervivencia esté asegurada.
    • La implantación de la grasa no precisa de incisiones ya que es inyectada de forma muy meticulosa. Con los lipoimplantes se puede ir dando la forma precisa a los tobillos, pantorrillas o muslos, la única limitación estará en la elasticidad de la piel.
    • En casos muy severos los lipoimplantes pueden ser usados junto con prótesis de gemelos (por ejemplo) para resolver el caso en una sola operación y conseguir resultados muy naturales ya que el implante quedará oculto y sus contornos suavizados. Dado que las prótesis solo actúan sobre la pantorrilla, el uso simultáneo de lipoimplante facilita que la mejoría pueda abarcar también a la rodilla o los tobillos. Nosotros llamamos a este procedimiento aumento compuesto de gemelos.

    El postoperatorio tras un lipoimplante o injerto de grasa en tobillos, pantorrillas o muslos es sencillo y suele permitir la reincorporación a una vida cotidiana en menos de una semana. El paciente suele moverse con normalidad aunque deberá guardar un reposo relativo. Cuando se trata de un aumento compuesto de gemelos el postoperatorio se puede prolongar entre una y dos semanas debido a que la prótesis usada requiere de mayor reposo.


    El uso de lipoimplantes o injertos de grasa para reconstrucción de secuelas de polio o de otro tipo es una alternativa más segura, más versátil, con menos efectos secundarios y con mejor recuperación que las anteriores. La ventaja adicional es no tener zonas demasiado limitadas de actuación (como las prótesis) ya que, con experiencia, pueden distribuirse con libertad por prácticamente cualquier área de los muslos, pantorrillas o tobillos. Para el tratamiento de los tobillos los injertos de grasa o lipoimplantes son la única alternativa segura.

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